banner_Klave_masdeloqueesperas_1000x80px.gif
redfundamentos.com

ARQUITECTURA Y UNIVERSIDAD. SINERGIAS EN IBEROAMÉRICA

redfundamentos reúne espacios vinculados al mundo de la arquitectura y la universidad en España e Iberoamérica · redfundamentos.com

Publicación asociada a las Escuelas de Arquitectura de España e Iberoamérica · ritafundamentos.com

Buscador de cursos, masters y formación de posgrado en España e Iberoamérica · cursosfundamentos.com

Selección de obras y noticias · blogfundamentos.com

Arquitectos y estudiantes debaten sobre temas académicos y profesionales · forofundamentos.com · PROXIMA APERTURA

Base de datos sobre autores, textos publicados e inéditos y tesis doctorales · archivofundamentos.com · PROXIMA APERTURA

9/9/2022

Pabellón de Sombras

7/25/2022

Last chance for a slow dance

5/20/2022

Plaza de la Sinagoga

5/12/2022

Piscinas municipales en Castromonte

4/5/2022

Edificio sobre estación de metro en Plaza de Armas, Santiago de Chile

OBRAS

7/23/2020

Salón del Café

El Salón del Café está ubicado dentro de la finca cafetera Frajares en Nanegalito, Provincia de Pichincha, en una zona a 1.700 metros de altura —de especiales condiciones climáticas—, que permite el cultivo de variedades de café de enorme sabor y aroma. Nanegalito es un lugar cambiante y dinámico, complejo e indeterminado. La finca goza de una condición topográfica extraordinaria: se encuentra en la parte más alta de la zona, situación que favorece las vistas hacia las cadenas montañosas de los Andes y hacia la costa ecuatoriana.Vista exterior del Salón del Café. Fotografía: Felipe PalaciosA través del recorrido por la plantación, que se desarrolla en una serie de colinas con pendientes pronunciadas, se identificaron varios puntos de interés para generar inserciones arquitectónicas estratégicas en el paisaje. Mediante el desarrollo de operaciones complementarias de paisajismo y arquitectura, se quiere contar una historia de sensaciones en torno a la experiencia del café, los procesos de producción, cosecha, poscosecha, secado, tueste y molienda. El Salón del Café es el primer paso de una estrategia más amplia planteada para la finca: el cafetal contará con una tienda/museo, cafetería y senderos interpretativos que complementarán la experiencia del café.Detalle de apoyo sobre el terreno. Fotografía: Felipe PalaciosDesde el inicio, la idea fue introducir quirúrgicamente un elemento arquitectónico singular y volumétrico de pequeña escala, que se conectara en diferentes niveles con esta experiencia del café. El Salón revela el paisaje como un mirador cubierto, un refugio que invita a mirar el entorno con ojos frescos. Se implanta cuidadosamente en una zona alta donde empieza una pronunciada pendiente y paralelo a una hilera de alisos existentes, que brindan sombra y abrazan el volumen.Vista interior del Salón del Café. Fotografía: Felipe PalaciosEl Salón se compone de un solo volumen alargado que se separa gradualmente del terreno. Esto obedece a una razón doble: las condiciones climáticas locales y la sensación de levitación deseada sobre el cafetal.La parte frontal es un espacio abierto y transparente. Las mamparas laterales y pivotantes, elaboradas con una delicada carpintería, difuminan los límites del interior y el exterior, y permiten disfrutar de unas visuales interesantes de la plantación, y la cordillera circundante. Por otro lado, los elementos de servicio se han dispuesto silenciosamente en la parte posterior, que corresponden a la zona cerrada de baños y mesones de apoyo. El espacio resultante es versátil, listo para acoger el programa requerido desde salón de cata y maridaje, cafetería, comedor, mirador, y aula.Área de cafetería. Fotografía: Felipe PalaciosLas soluciones arquitectónicas vernáculas locales, tales como techos inclinados, predominancia de la madera, y separación del suelo, fueron interpretadas en un proceso constructivo meticuloso. Las articulaciones entre los acabados fueron meditadas como un aparejo complejo con distintas naturalezas, — acero, madera, hormigón— donde la protección contra la intemperie era un objetivo primordial.Detalle de materiales. Fotografía: Felipe PalaciosPor un lado, el sistema estructural de acero fue debidamente modulado para su transporte e instalación en el sitio, procurando optimizar la cantidad de elementos utilizados. La medida de 1.20 metros fue una constante de modulación tanto del acero como de la madera. Las duelas de colorado machihembradas y trabadas se articulan con planchas de acero dobladas sin dejar esquinas expuestas al exterior. En el interior, la cubierta ligera inclinada se ha recubierto de tableros de seike, diseñados para que no existan desperdicios.

+ Info

7/16/2020

La Comuna

Una fundación y empresa privada solicitaron a los arquitectos de Natura Futura Arquitectura y Frontera Sur Arquitectura el desarrollo del proyecto La Comuna con el objetivo de mejorar el hábitat de una familia dedicada al reciclaje bajo unas condiciones insalubres y sin espacios adecuados para el desarrollo de esta actividad.Vista exterior La Comuna. Fotografía: José Fernando Gómez y Cristhian BravoLa Comuna busca mantener un dialogo constante con el desarrollo de la ciudad a través de las distintas actividades que se desarrollan tanto en el interior y como en el exterior de la propuesta, convirtiéndose en un intermediador que facilita los procesos productivos y que impulsa el emprendimiento de los propietarios.Zona de trabajo en planta baja. Fotografía: José Fernando Gómez y Cristhian BravoEl proyecto cuenta con un área en la planta baja que funciona como espacio de almacenamiento y clasificación de los residuos, se crea un área dedicada únicamente al trabajo que contribuye al aumento de la productividad de la familia. Para facilitar el proceso de reciclaje en Huaquillas, se han situado en puntos estratégicos de la ciudad una serie de contenedores de colores que se identifican con los distintos residuos.Entrada a la planta baja. Fotografía: José Fernando Gómez y Cristhian BravoEn la planta alta se incorpora una vivienda adaptable que se fusiona con el espacio de producción de la planta baja de acuerdo a las necesidades de la familia. La vivienda parte desde la contraposición entre experimento y proyecto, en ella predominan dos conceptos clave: la permeabilidad espacial y la autogestión del espacio.Vista desde la primera planta. Fotografía: José Fernando Gómez y Cristhian BravoEl sistema estructural del edificio se conforma a partir de 6 módulos de 12 m² cada uno, visibles gracias al sistema de aberturas del mismo. Para conseguir una habitabilidad flexible, los usuarios disponen de paneles giratorios que permiten modificar el espacio en su día a día.Mobiliario móvil en planta primera. Fotografía: José Fernando Gómez y Cristhian BravoLa comuna se convierte en un hito para la ciudad debido al proceso de transformación que tuvo, con antecedentes de insalubridad y contaminación. El proyecto comunica un discurso de concienciación a través de su fachada con un mensaje, generando reflexión entre lo privado y lo público a través de la arquitectura y del reciclaje.

+ Info

7/9/2020

Entorno del faro de Estaca de Bares

El entorno del faro de Estaca de Bares es un lugar de un carácter excepcional, tanto por su singularidad geográfica, como por sus valores patrimoniales. Estaca de Bares es el punto más septentrional de la Península Ibérica y en su extremo se encuentra un faro de mediados del siglo XIX levantado sobre el yacimiento, de un castro prehistórico de incalculable valor patrimonial. A escasa distancia del faro se hayan los restos de una base militar norteamericana que estuvo activa hasta los años 90, y muy cerca se encuentra un importante punto de observación de aves migratorias que sobrevuelan Estaca en su camino desde el norte de Europa hacia la península Ibérica. Todo este conjunto de valores ha convertido este entorno en un punto de gran interés turístico.Vistas desde la plataforma. Fotografía: Héctor Santos DiazEl espacio de actuación se centra en una plataforma de unos 2.000 m² situada a escasos metros del faro. Sobre ella se levantó en su día el primer parque eólico de Galicia que una vez desmantelado a finales de los años 90, se convirtió en aparcamiento para los visitantes. El proyecto surge de la necesidad de mejorar la plataforma debido al deterioro sufrido por su uso constante, en un entorno con además una climatología muy exigente.Vistas desde la plataforma. Fotografía: Héctor Santos DíezPara resolver esta necesidad el equipo optó por una superficie adoquinada ejecutada con granito local. Para resolver las necesidades básicas de ordenación, se propone un equipamiento y una señalética que nacen a partir del pavimento con la intención de reducir al máximo su presencia.Como borde de protección del aparcamiento con el acantilado, se generaron unos planos quebrados, que a modo de parapetos inclinados se levantan con el mismo material que el suelo. Estos constituyen al mismo tiempo el límite para los automóviles y un espacio de asiento con vistas al océano.Parapeto inclinado. Fotografía: Héctor Santos DíezA mayores, la propuesta ha pretendido liberar el lugar de ciertas construcciones en desuso, alguna de gran porte como fue la antigua torre de señales acústicas y otras de menor tamaño como los antiguos cierres y las columnas para instalaciones del antiguo parque eólico, elementos que distorsionaban el carácter natural del lugar.Base de un aerogenerador del primer parque eólico de Galicia. Fotografía: Héctor Santos DíezEl objetivo del proyecto se centra en recuperar el carácter natural del lugar e intentar convertir un aparcamiento en un espacio de recepción, origen de distintos caminos y a la vez dotar a los minusválidos de un espacio donde sentirse protagonistas. El proyecto propone simplemente un marco con la intención de subrayar el carácter de la naturaleza de este lugar y de ese modo intentar protegerla.

+ Info

7/2/2020

Módulo de vivienda sostenible | 10 Historias de Arena

10 Historias de Arenaes un proyecto donde se fabricaron diez módulos de vivienda temporal sostenible para diez familias afectadas por el fenómeno de El Niño costero, que tuvo lugar en 2017 en diferentes áreas desérticas al norte de Perú. La propuesta desarrolla un prototipo de vivienda sostenible de crecimiento progresivo y modular, optimizando los sistemas tradicionales del desierto, para situaciones posdesastre. El proyecto se construye mediante un montaje simple, utilizando materiales de origen artesanal e industrializado, que cumplen el requisito de ser de bajo costo.Vista aérea. Fotografía: Soledad Maldonado y Carlos Pastor Santa MaríaEn la investigación previa, tecnologías emergentes —tradicionales del desierto— fueron estudiadas y aplicadas como estrategias para resolver el edificio y su emplazamiento. Las tres variables utilizadas en el desarrollo del proyecto son:- Materiales no-industrializados: tejidos de fibra de origen orgánico en zonas rurales del desierto.- Materiales industrializados: desarrollados industrialmente, tipificados y modulados.- Prefabricación, que involucra las dos variables anteriores, resolviendo procesos donde los materiales permiten ser ordenados, cuantificados y ensamblados en el lugar final sin generar mermas, evitando su impacto en el entorno.Materiales utilizados para la construcción de los módulos. Fotografía: Soledad Maldonado y Carlos Pastor Santa MaríaDurante el proceso de construcción, miembros de las familias participaron en el montaje del módulo habitable. Esta participación en la construcción del proyecto es clave para lograr su éxito. El objetivo del montaje participativo fue que las familias acogieran el módulo como su propio hogar, al haber sido construido por ellas mismas. Las familias construyeron aplicando técnicas de construcción tradicionales y ancestrales del desierto, como en la construcción del cerramiento, hecho de carrizo recolectado de zonas húmedas, y que es utilizado en el sistema constructivo tradicional de la quincha, el cual consiste en un entramado de caña recubierto con barro.Proceso de construcción de la estructura. Fotografía: Soledad Maldonado y Carlos Pastor Santa MaríaEl proyecto contempla un 80% de materiales de origen orgánico, de uso común entre los habitantes rurales, y un 20% de materiales prefabricados, que dan el soporte estructural al proyecto en relación al entorno que enfrenta. Los materiales orgánicos pueden ser reemplazados cuando su ciclo de eficiencia termine. Esto busca incentivar el cultivo de carrizo para el beneficio de las comunidades.Montaje de la envolvente. Fotografía: Soledad Maldonado y Carlos Pastor Santa MaríaEl edificio utiliza estrategias climáticas pasivas para mantener una temperatura de confort constante dentro del clima del desierto. El edificio está modulado en 1,22 por 2,44 metros, medidas estándares en formatos de materiales derivados de la madera, como el contrachapado o paneles de madera, además de la prefabricación de distintos elementos industrializados, a fin de lograr una eficiencia máxima de los materiales, y un mínimo de residuos.Detalle del encuentro de la estructura y la envolvente. Fotografía: Soledad Maldonado y Carlos Pastor Santa María

+ Info

6/25/2020

El Camarote

El Camarote es una vivienda de bajo costo ubicada en las afueras de la ciudad de Quito. Está implantada en un sector que a mediados de los años setenta era bastante rural, rodeado de vías angostas y grandes maizales. Actualmente, el contexto de campo y paisaje rural ha cambiado radicalmente a causa del desarrollo y percepciones erróneas de modernidad. Así, el proyecto busca reconstruir la idea de una arquitectura lugareña que poco a poco se ha borrado a causa del acelerado crecimiento inmobiliario, reemplazado a su vez por una tipología habitacional intrusa y en serie, que ha exterminado el imaginario de campo.Vista exterior. Fotografía: JAG StudioLo rural, impreciso y artesanal de los vestigios del sector es el gran repositorio de ideas para experimentar con una arquitectura de pequeña escala y ligada a este paisaje vulnerable. En esta geografía residual se intenta decodificar texturas y colores, así como construcciones anónimas que componen un atlas visual de singularidades. El resultado es una vivienda compacta que dialoga con la memoria y los materiales locales.Entrada de la vivienda. Fotografía: JAG StudioEl Camarote, es el nombre que en el transcurso del proceso adquirió el proyecto, en especial por su aproximación a los habitáculos de viaje donde todo es compacto, público y fluido. La propuesta está compuesta por dos plataformas de hormigón separadas del suelo, un esqueleto ligero de madera y una piel mixta (ladrillo, madera, metal y vidrio) que sella la vivienda. Esta envolvente esconde en su interior una topografía de espacios, que diferencia las áreas públicas de las privadas. El resultado final es un objeto rústico y multifacético, con muchas sorpresas, que dialoga intensamente con el exterior mediante los vacíos, las aberturas y los flujos de movimiento.Vista panorámica de la planta baja de la vivienda. Fotografía: JAG StudioLa relación del interior con la vegetación, y la fusión entre estructura, piel y espacio, siempre bajo la guía de la manufactura de pequeños detalles, son los principales logros del proyecto. Como consecuencia surge un gran atlas de piezas y mecanismos singulares que son parte esencial de este proyecto. Estas condiciones artesanales imprimen a la vivienda una atmósfera de calidez y domesticidad, muy propias de una casa de campo.Vista desde la entreplanta. Fotografía: JAG StudioEl proceso de imaginar la casa fue para el arquitecto una experiencia constante de reflexión e indagación. Por una parte, entender el impacto de una tipología serial, invasiva y deshumanizada que actualmente está presente en el valle y por otra, tratar de rescatar una memoria arquitectónica silenciosa aún existente en los alrededores. Con ello, el camino de pensar, sistematizar y construir la obra fue bastante experimental e intuitivo. El resultado, como tal, es un laboratorio de preguntas y respuestas.

+ Info

6/18/2020

La Linda bakery Carrasco

El proyecto consiste en la transformación de una pequeña casa jardín de 1927, con alto grado de protección patrimonial, en una panadería y café.El nuevo destino implicaba incorporar un sector de producción que en sus dimensiones era incompatible con la superficie interior de la vivienda. Por este motivo se decidió destinar el espacio de la casa al sector público e incorporar el área de producción en una ampliación de nueva planta sobre el jardín.Entrada la Linda bakery Carrasco. Fotografía: Javier Agustín RojasA partir de esta decisión la posibilidad de plegar en un mismo acto los mundos de la cocina y el de los comensales se convirtió en el tema recurrente. Las escenas de la película de Peter Greenaway, “El cocinero, el ladrón, su mujer y su amante”, grabadas en un mismo set teatral reafirmaron esta idea.Vista desde el jardín. Fotografía: Pablo Casals AguirrePor ello el nuevo sector de producción se dispuso totalmente abierto sobre uno de los laterales del jardín posterior. La gran apertura se resuelve con una viga alta de acero que interseca y libera parte de la vivienda existente. La viga se sostiene en un pilar en V invertido que evidencia el esfuerzo y coloca los diferentes elementos en equilibrio. La total apertura hacia el exterior convierte el sector de producción, la cocina, en la escena visual del jardín.Interior de la casa jardín rehabilitada. Fotografía: Javier Agustín RojasDesde el punto de vista material los elementos preexistentes se restauran manteniendo los pavimentos y carpinterías originales. Los paramentos verticales y cielos se pintan de blanco con el fin de eliminar el peso de un habitar anterior.Teaser La Linda, Pablo Casals Aguirre

+ Info

Recomendados

376x216px---REBUILD-2024---Boton.jpgRelatos deconstruidos.jpgRecomendados Cuanto cuento.jpgMIlenka Alcon.jpgAsí se hizo.jpgbanner.jpgMucho cuento.jpg

Colaboran

Anuncio Cooperacion_nue.pngLogo-CEDODAL.jpgcasamerica-logo.png

Reconocimientos

reviewbox-site-2021-es.pngmencion-ixbiau-2.pngpremiocoam-14.jpgfinalista-fad2014-3.png
redfundamentos.com © 2024 Todos los derechos reservados · Aviso legal y Política de Privacidad
ediciones redfundamentos