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DECORACIÓN Y SIMPLICIDAD. REFLEXIÓN EN LAS ETAPAS DEL CRECIMIENTO ECONÓMICO · 5/8/2019

A lo largo de 19 años, he investigado la ecología de los enseres y he podido observar condiciones domésticas diferentes. Aunque la vivienda sea relativamente grande, creo que hay hogares desbordados por sus objetos. También hay viviendas pequeñas que tienen enseres como las otras, y sin embargo las familias viven de manera limpia y ordenada.

En el fondo parece que existe una diferencia en lo que llamamos sentido de la belleza entre “el gusto por la decoración” y el “gusto por la simplicidad”. El profesor Yasuyuki Kurita del Museo Nacional de Etnología teoriza con la idea de que “en los japoneses esos dos sentidos de belleza coexisten”.

A los japoneses les gustan las cosas muy limpias y sencillas. Sin embargo en el otro extremo de la belleza de la simplicidad también existe la de la forma decorada. Algunos buenos ejemplos son el mundo del Kabuki, el santuario Toshogu de Nikko, el interior de un templo o de un altar budista, así como a día de hoy, la decoración de coches fúnebres, entre otros. “No debemos olvidar que para la mente de los japoneses es difícil superar el pulso mantenido contra la belleza de la decoración,” añade Yasuyuki Kurita.

En cambio, Shoichi Inoue, Profesor Asociado del Centro Internacional de Investigación para Estudios Japoneses, defiende la teoría de que “el sentido estético de la decoración ha sido trasmitido históricamente desde la clase elitista a los estratos sociales inferiores”. La solemnidad de la posición de la élite feudal no reflejaba riqueza. La nobleza adornaba con recato. Y así fue como en teoría descendió de la clase superior a la gente.

Pienso que el “gusto por la decoración” surge en las familias en los periodos de crecimiento económico y material de una sociedad, mientras que el “gusto por la simplicidad” se vuelve predominante en los periodos de estabilidad o de estancamiento. Desde este punto de vista, sinceramente, podría decirse que desde el periodo de gran crecimiento económico hasta nuestros días la mayoría de los japoneses se han sumergido fundamentalmente en el espíritu del “gusto estético decorativo”. Sin embargo, si las condiciones económicas actuales se mantienen, podríamos estar avanzando hacia la belleza de la simplicidad.

Autor: Masahiro Hikita. Traducción: Nadia Vasileva, Jin Taira

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Img. 01: Detalle decorativo de la entrada principal (Puerta Karamon) del Castillo de Nijo, Kioto. El castillo fue construido durante el periodo Edo (1603-2868) como residencia de los shogunes del clan Tokugawa. Fotografía: Jin Taira

Img. 02: Edificio Kyozo (almacén de sutras budistas) en el Santuario Toshogu de Nikko, fachada y detalle de la decoración. Fotografía: Nadia Vasileva.

Img.03: Santuario Toshogu de Nikko. Kamijinko (Almacén Sagrado Superior, izquierda) y Shimojinko (Almacén Sagrado Inferior, derecha). Fotografía: Nadia Vasileva.

Img. 04: Decoración de coche fúnebre. Fotografía: Jin Taira.

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